El aceite esencial es un estimulante sanguíneo y tonificante. Ayuda a aliviar la depresión, neuralgia, tensión y estrés. El aceite de lavanda alivia el estrés inducido por el insomnio gracias a sus propiedades relajantes y calmantes ayudando a conciliar el sueño.
Uso
Aromaterapia: Usar con un difusor o añadiendo unas gotas en agua caliente para inhalar el vapor.
Vía Tópica: Los aceites esenciales debes diluirlos primero en un aceite portador o vegetal (coco, zapuyul, jojoba, rosa mosqueta, almendra, semilla de uva, macadamia o en nuestro aceite base) para utilizarlos como aceites de masaje.
Puedes añadir unas cuantas gotas al agua de tu bañera.
Precauciones
No utilizar durante el embarazo. Evitar el contacto con los ojos. No ingerir. No usar si se padecen enfermedades del riñón o el hígado. No usar puro sobre la piel. Conservar el aceite esencial en un lugar seco, fresco y fuera del alcance de la luz. Mantener fuera del alcance de los niños.
El aceite esencial es un estimulante sanguíneo y tonificante. Ayuda a aliviar la depresión, neuralgia, tensión y estrés. El aceite de lavanda alivia el estrés inducido por el insomnio gracias a sus propiedades relajantes y calmantes ayudando a conciliar el sueño.
Uso
Aromaterapia: Usar con un difusor o añadiendo unas gotas en agua caliente para inhalar el vapor.
Vía Tópica: Los aceites esenciales debes diluirlos primero en un aceite portador o vegetal (coco, zapuyul, jojoba, rosa mosqueta, almendra, semilla de uva, macadamia o en nuestro aceite base) para utilizarlos como aceites de masaje.
Puedes añadir unas cuantas gotas al agua de tu bañera.
Precauciones
No utilizar durante el embarazo. Evitar el contacto con los ojos. No ingerir. No usar si se padecen enfermedades del riñón o el hígado. No usar puro sobre la piel. Conservar el aceite esencial en un lugar seco, fresco y fuera del alcance de la luz. Mantener fuera del alcance de los niños.