Este aceite es conocido por sus propiedades antibacterianas, antivirales y antiinflamatorias, por lo que se utiliza comúnmente para tratar problemas respiratorios, como el resfriado y la tos, y para reducir el dolor muscular. También se ha demostrado que puede ayudar en el tratamiento de algunas enfermedades infecciosas y problemas digestivos.

Uso

Aromaterapia: El uso del aceite esencial de orégano en un difusor es una forma efectiva de mejorar la salud respiratoria y crear un ambiente relajante. Usar con un difusor o añadiendo unas gotas en agua caliente para inhalar el vapor.

Vía Tópica: Aplicado tópicamente, el aceite esencial de orégano puede ayudar a reducir la inflamación y el dolor, y puede ser útil para tratar la piel seca. Se recomienda diluirlo en una crema o un aceite de masaje antes de su uso.

 Los aceites esenciales debes diluirlos primero en un aceite portador o vegetal (coco, zapuyul, jojoba, rosa mosqueta, almendra, semilla de uva, macadamia o en nuestro aceite base) para utilizarlos como aceites de masaje.

Puedes añadir unas cuantas gotas al agua de tu bañera.

Precauciones

Se deben tomar precauciones especiales al usar aceite esencial de orégano en niños, mujeres embarazadas o en periodo de lactancia, y personas con enfermedades crónicas o medicamentos prescritos, ya que puede tener efectos secundarios.
Mantener fuera de su alcance de niños y mascotas.

No utilizar durante el embarazo. Evitar el contacto con los ojos. No ingerir. No usar si se padecen enfermedades del riñón o el hígado. No usar puro sobre la piel. Conservar el aceite esencial en un lugar seco, fresco y fuera del alcance de la luz. Mantener fuera del alcance de los niños.